jueves, 19 de agosto de 2010

Amor versus dignidad




Yo soy el hombre que tú esperas,
Estoy disponible pero te cuesta verme.
Es mi propia vida la que me oculta;
delante de mí están mis hijos, mi trabajo, mi ex esposa, mi historia.
Ahí estoy yo.

Te envío señales pero no puedes advertirlas.
Es que delante tuyo también está tu propia vida que te oculta;
tus hijos, tu trabajo, tu ex pareja, tu historia.
Nada de esto podemos borrar.
Soy el que te quiere, pero te cuesta reconocer mi amor.
Quizá porque no puedo darte lo que me pides.
No puedo satisfacer tus urgencia.
Apenas puedo compartir lo que tengo.

Confío en nuestro encuentro
pero necesito que te sostengas y necesito sostenerme.
Te necesito firme, fuerte y paciente.
Dando lugar a que nuestros hijos y nuestra historia
nos abran un espacio en sus almas.
El espacio necesario
para que tu corazón llegue hasta mí.





Todo eso se puede superar, costará pero seguro que todo eso que describe lo superaran.


Estoy segura que si dos personas se esfuerzan siempre habrá un plan B. Pero hay otras cosas, las que no se ven, las que no se cuentan, las que no se saben, que no son ni los ex, ni las historias pasadas, ni los trabajos, hay otras cosasssssss que separan a las personas más alla de los sentimientos y emociones que se puedan sentir.

Cosas que no son negociables, los principios y la escala de valores de cada uno/a nunca deben someterse al amor, y eso es lo más díficil de aceptar, la consciencia contra la incosciencia, la razón contra la emoción. Mi dignidad, todo en lo que yo creo, es lo que me hace ser persona, ser como soy y,  renunciar a eso por una historia de amor, no es sano, ni maduro, no es orgullo,  es saber quién eres y hacia dónde vas y atraverte a luchar por ello, aunque te cueste, joder y como cuesta.

No hay comentarios: